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Un primer paso hace 90 años, la XEW

Grandes radionovelas se guardan en el recuerdo de abuelos y papás, a recordar por ejemplo "Anita de Montemar", "Felipe Reyes", "Chucho el roto" o "Kalimán".

Un primer paso hace 90 años, la XEW

Un primer paso hace 90 años, la XEW

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Hace noventa años, una euforia inusitada se vivía en la Ciudad de México, así como en varias partes de la república mexicana y el extranjero, en donde existía un costoso y exclusivo aparato llamado radio y que era evidentemente caro y difícil de conseguir.

La XEW iniciaba sus transmisiones a las 8 de la noche del 18 de septiembre de 1930. La frecuencia que se le asignó fue la de 900 kHz de la banda de A.M. con 5,000 watts de potencia en canal libre internacional. El éxito hizo crecer la potencia a 10,000 y luego a 50,000 watts en poco tiempo.

Era el sueño hecho realidad de un tampiqueño, nacido el 2 de marzo de 1895, hijo de Mariano Azcárraga y López de Rivera y de Emilia Vidaurreta y Rovira, ambos de origen vasco y radicados en la ciudad de la zona del golfo.

Emilio Azcárraga Vidaurreta, estudio primaria en Piedras Negras, Coahuila, luego lo enviaron sus padres a San Antonio, Texas, para estudiar secundaria e inglés y la preparatoria en Austin. Lo primero que vendió fueron zapatos en esta ciudad norteamericana, mientras que por la noche, estudiaba negocios y economía.

Ascendió pronto en la zapatería, al grado que logró que le dieran la concesión para distribuir zapatos en Boston. A los 22 años funda su primer empresa: "Azcárraga & Copland". Casi simultáneamente inicia operaciones con una distribuidora de automóviles, pero desde 1920 trabajaba también en la división "México Music Company" filial de la RCA y la música le comenzó a llamar la atención y más porque su hermano Raúl aprendió la técnica de la radiotransmisión de manos de un coronel estadounidense Sandal S. Hodges.

Azcárraga, entonces, buscó la licencia para vender radios marca Victor Talking Machine. Pero... ¿cómo solo vender radios, cuando podía vender aire?, le comentó en alguna ocasión a su fiel secretaria Amalia Gómez Zepeda.

En 1925, Emilio se casa con Laura Milmo Hickman y mientras las empresas crecían y se formalizaba el sueño de la radio, nace el 6 de septiembre su hijo Emilio y ocurre algo que marca su vida para siempre.

Sucede que los trabajos para sacar al aire la señal de la XEW iban muy avanzados, pero no podía salir al aire oficialmente, hasta que no hiciera las pruebas pertinentes y adicionalmente, porque no había estudios para producir y esto tenía que ser en vivo, aún no se inventaba la grabación en cinta, solamente en discos que resultaban complicados de maniobrar, ya que al ser de material que fácilmente se rompía, se volvían inseguras las grabaciones, la fecha prevista era para el 15 de septiembre de 1930, con algo de música en una noche mexicana por radio.

Pero su primogénito nace en Houston en la fecha citada en San Antonio, Texas, por lo que feliz y contento, da la orden de que se haga lo imposible para salir al aire de inmediato.

Amalia recibe la llamada y le comunica la instrucción al Ing. José de la Herrán, su técnico de confianza quien lo más que logró fue que le autorizara la Secretaría de Comunicaciones, salir en plan de pruebas el 7 de septiembre. Herrán y su familia, incluso llegaron a vivir a un lado de la transmisora en las proximidades de donde hoy se encuentran las estaciones, esto es en Tlalpan 3000, entre las haciendas de San Antonio y Coapa, al sur de la Ciudad de México, en donde les mandó Don Emilio construir su casa para resolver cualquier problema técnico de emergencia, en lugar de tomar carretera entre el centro de la ciudad y la alejada transmisora, más de hora y media de camino y en secas. A medias, pero finalmente al aire, la XEW se une al festejo de Don Emilio, quien celebra así, el nacimiento del "Tigre".

El día 15 de septiembre y colocando un micrófono al auricular de un teléfono, hacen su primer "control remoto", desde Palacio Nacional, transmitiendo el Grito de Independencia a cargo del presidente Pascual Ortiz Rubio.

Pero el "bombo y platillo" estaba reservado aún y el 18 de septiembre se da forma a la sociedad que había firmado con la RCA, sí, aquella que mencionamos como vendedora de tocadiscos y radios, la México Music Company, así como préstamos del Banco de Londres y México en inversión por adelantado de la Cervecería Cuauhtémoc como parte de patrocinio de la cerveza Carta Blanca.

Salen al aire, pero sin estudios formales, al menos no para los sueños de Don Emilio. Los primeros estudios de la XEW se encontraban en la calle 16 de Septiembre número 23, en los altos del cine Olimpia, también propiedad de Azcárraga Vidaurreta. La transmisión inicia con un: "Buenas noches, bienvenidos", seguido de el "Himno a la Alegría" de Ludwig Van Beethoven con la voz de Miguel Lerdo de Tejada, acompañado de la Orquesta Típica de la Policía. La primera voz al aire se le atribuye al locutor Leopoldo de Samaniego, quizá por acuñar la frase insignia de la estación “Esta es la XEW, la voz de América Latina desde México”, pero en realidad el saludo y primera voz al aire fue la de Nicolás de la Rosa. La ceremonia de inauguración fue encabezada por el fundador de la estación, Emilio Azcárraga Vidaurreta, el entonces secretario de Educación, Aarón Sáenz y los socios inversionistas de la RCA, banco y la cervecería.

En el desfile de elenco se cuenta la presencia de Juan Arvizu, Josefina "La Chacha Aguilar", Francisco Salinas y Ofelia Euroza como invitados. Las voces de los locutores Ricardo López Méndez, Alonso Sordo Noriega, Manuel C. Bernal, Pedro de Lille y Pepe Laviada engalanaron el festejo que se prolongó hasta cerca de las 11 de la noche.

Cinco años de trabajo y las utilidades correspondientes ante el inusitado éxito de "vender aire" y en 1935 se habían pagado los créditos y se construye el Teatro Alameda. Cabe mencionar que Azcárraga pidió las siglas de la estación fueran XEW, para reafirmar un posicionamiento internacional, ya que las grandes cadenas y estaciones de Estados Unidos portan la "W" como identificativo. Estrategia de mercado finalmente. Un año antes, en 1934, deja de alquilar y estrena los estudios de Ayuntamiento 52 y 54, ya con acceso al público, áreas técnicas eficientes, cafetería y muchas interesantes amenidades, en donde lo mismo se veía a Agustín Lara que a Manuel Esperón o Toña La Negra. Las radionovelas se hacía en vivo, incluyendo falsos caballos y balazos que al aire se escuchaban reales, pero que en realidad eran incidentales realizados por Gonzalo Gavira, quien luego ganaría un premio Oscar por sus incidentales en "El Exorcista".

Tal era el éxito que grandes filas se formaban para entrar a ver y escuchar Pedro Infante o a Miguel Aceves Mejía sin pagar un solo peso, o bien buscar la fama en "La hora del Aficionado", reír en "El risámetro" o conocer a Francisco Gabilondo Soler "Cri Crí", que se pensó en construir unos estudios más grandes.

A unas cuadras de ahí, en las esquinas de Chapultepec y Balderas, había una casas que se vendían como terreno y Don Emilio lo adquiere para hacer "Radiópolis" o la "Ciudad de la Radio".

Grandes radionovelas se guardan en el recuerdo de abuelos y papás, a recordar por ejemplo "Anita de Montemar", "Felipe Reyes", "Chucho el roto" o "Kalimán".

XEW es también escuela de grandes voces, ya que en esa época (y como debe ser también ahora) se aprendía con la práctica, surgiendo voces inmortales como las de Edmundo García, Manuel de la Vega, Carlos Pickering -Licencia número 1 de locutor en México-, Pedro de Lille, Miguel Ángel Palomera de la Reé, Jaime Ortiz Pino -quien hiciera grandes programas en el Canal 58 de Guadalajara- Carlos Amador, Enrique “El Perro” Bermúdez, Ramiro Gamboa, Jorge Marrón, Ignacio Martínez Carpinteiro, Pedro Moreno -más adelante Director de la XEWK de Guadalajara, buen jefe y mejor amigo- o Héctor Martínez Serrano, Paco Malgesto, Pedro Ferriz Santa Cruz, Jacobo Zabludovsky, Daniel Pérez Alcaráz, Paco Stanley…

El 1 de julio de 1975, se conforma oficialmente el Grupo Radiópolis, con la integración de XEW, XEQ y XEX y sus respectivas FM, cambiando instalaciones en 1992 a Tlalpan No. 3000. Más adelante se asocian con Grupo Prisa de España y recientemente, vuelve a manos de mexicanos y cercanas a Televisa por medio de la compra por parte de Grupo Alemán, de Miguel Alemán Velasco y Miguel Alemán Magnani.

Con las notas clásicas de la XEW, campanillas que perduran de generación en generación, por ahora y como siempre... Arrivederchi.