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La promoción hace la diferencia entre un destino turístico exitoso y uno que tiene que seguir esperando. A nivel mundial es un negocio de proporciones colosales, de casi el diez por ciento del PIB planetario. Como es natural todos los países quieren una tajada y por lo tanto la competencia es descarnada. México está dotado integralmente para ser una potencia turística. A sus bellezas naturales suma una densidad cultural que casi ningún otro país tiene. Playas de ensueño, es verdad, pero también cientos de sitios arqueológicos, joyas del virreinato, Pueblos Mágicos, gastronomía, servidores capacitados y la calidez de la gente a la que le gusta recibir visitas.
A México le va bien, pero le puede ir mucho mejor. De enero a agosto de este año por concepto de turismo internacional México captó 22 mil millones de dólares, que es una cifra importante pero que podría crecer en el corto plazo siempre y cuando tenga el apoyo de una promoción turística profesional, bien digerida, que posicione al país como un lugar digno de ser visitado desde cualquier lugar del mundo.
La promoción tiene tantos formatos como alcance la imaginación de los promotores. Paris, por ejemplo, aprovechó la realización de los Juegos Olímpicos para promocionarse por todo lo alto. Fue un alarde, casi un exceso, de los atractivos de la capital francesa. Para promocionarse hay que ir a las principales ferias de turismo del mundo y ponerse en contacto con los mayoristas para ofrecer nuestros atractivos que son muchísimos. De ahí que la Secretaría de Turismo, que comanda ahora Josefina Rodríguez, ratificara que México estará presente en la Feria Internacional de Turismo de Madrid, que es el primer gran evento del calendario turístico mundial ya que se realiza en enero, en este caso del 22 al 26 en la capital española. Hay varias ferias turísticas a lo largo del año, pero Fitur es siempre la primera. Los que saben, detectan ahí de qué lado soplará el viento.
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México suele tener buenos dividendos en Madrid ya que la a la delegación que encabeza la Sectur se suman muchas entidades federativas e incluso empresas del ramo que saben que hay que estar presentes sí o sí. Ya se prepara un stand monumental a la altura de la oferta turística mexicana. Será la primera ocasión en que Rodríguez Zamora acuda a la Feria como titular de la Secretaría. Por su experiencia en Tlaxcala sabe que si México quiere jugar en las grandes ligas debe tener un desempeño destacado en estos eventos.
Retomando el ejemplo de París, hay que recordar que México es uno de los países sedes de la Copa Mundial de Futbol 2026 evento que tiene que ser aprovechada para posicionar positivamente al país. Hay que echarle el resto. La titular de la Secretaría de Turismo lo sabe. En comunicado reciente confirmó que actualmente se encuentra en la etapa organizativa con la Institución Ferial de Madrid ya que México será el País Socio de FITUR 2026. Lo anterior, añadió, para fortalecer la presencia de México, no solo con los países participantes en esta importante feria turística, sino a todo el mundo, con miras a la celebración de la Copa Mundial de la FIFA 2026, y consolidar a México como una potencia turística.
La promoción es cara, pero da respuestas generosas en el corto plazo. Paris mostró su riqueza cultural y la verdad, sin presunciones, es que México puede competir con cualquiera. Además, para nadie es un secreto que México necesita las divisas turísticas. La actividad es la principal de empleadora de mujeres y jóvenes y es un factor central para la estabilidad social en muchos estados, además de tener la capacidad de detonar desarrollo regional. El turismo genera empleo y el empleo es el fundamento de la estabilidad social, lo único que falta, para cerrar el círculo virtuoso, es la voluntad política de las autoridades para darle al turismo el nivel prioritario que merece.