Ken Salazar prepara las maletas, pero antes de irse quiso dejar en claro lo que piensa. No reveló un secreto al decir que la estrategia de seguridad del sexenio pasado, encapsulada en la frase “abrazos, no balazos” no funcionó. Con ver lo atareados que andan los integrantes del Gabinete de Seguridad del nuevo gobierno es más que suficiente para saber que les dejaron una papa caliente.
Pero que lo diga sin filtros diplomáticos el embajador de Estados Unidos da a la frase un enfoque se sentencia, ya que Ken Salazar no habla por él mismo, es la voz de un gobierno extranjero sobre el nuestro.
Es claro que se dirá que Salazar no tiene que andarse metiendo en nuestros asuntos, pero lo dicho, dicho está. La declaración deja entrever que en diversas agencias norteamericanas la molestia va más lejos que una simple frase y que investigan las causas del fracaso, lo que puede generar migraña a figuras relevantes del pasado inmediato.
Ken ya está checando los vuelos para regresar a su país. Su aspereza es una probadita de lo que nos espera cuando Trump mande su embajador.
Avalan triunfo de Nahle
Rocío Nahle ganó la elección de gobernador de Veracruz de manera holgada, con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo lugar, que fue uno de los integrantes de la familia Yunes que ahora, quién lo diría, se han pintado de guinda, pero esa es otra historia.
A pesar de una diferencia de casi un millón de votos, hubo quien quiso ganar la contienda en el escritorio. Se presentaron impugnaciones que, ya se vio, no prosperaron. El TEPJF ratificó tanto la eligibilidad como la victoria de Nahle que ya es cosa juzgada. La voluntad popular se respetó.
Nahle tomara protesta el primero de diciembre y en Xalapa se espera que la presidenta Claudia Sheinbaum encabece el acto protocolario. Veracruz es un estado que lo tiene todo, como decía hace años su propaganda turística, pero también tiene problemas relevantes y por eso los ciudadanos llevan la cuenta de los días que faltan para que se vaya Cuitláhuac y llegue Rocío.
Tres mujeres en la CEM
La presidenta Claudia Sheinbaum, la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez y la subscretaria Clara Luz Flores, tres mujeres, se desplazaron hasta las instalaciones de la Conferencia del Episcopado Mexicano para reunirse con los hombres de negro, los obispos que conforman la jerarquía católica del país.
El tema como se esperaba fue el de la inseguridad sobre el que la Conferencia está enfocada desde la campaña presidencial. A decir de las notas, los obispos pidieron más acciones para facilitar el desarme y pidieron al gobierno un acercamiento con grupos de madres buscadoras.
La construcción de la paz en el país es el punto en el que convergen los obispos y las políticas que están al frente de las instituciones. Mantener el diálogo es la base para sumar esfuerzos.
Reunión de sintonía
Lo ocurrido en el Senado durante la reelección de Rosario Piedra como titular de la CNDH no dejó a nadie satisfecho. La bancada mayoritaria tuvo un comportamiento errático que generó fisuras entre diversos grupos.
Con el propósito de que en las sesiones sobre la desaparición de los organismos autónomos en San Lázaro no ocurra lo mismo, se abrió una pausa y se agendó una cita de los legisladores con la presidenta Sheinbaum para evitar que se tomen otra vez decisiones no avaladas por Palacio Nacional.
Que compartan un cafecito o dos para afinar lo que se quiere evitará que el desconcierto impere en la mega bancada de la coalición gobernante.