Opinión

Una canallada en Nueva York

El quarterback de Nueva York quedó fuera durante su sexta temporada frente al equipo de la división este de la conferencia nacional.
Daniel Jones quedó fuera de los Giants El quarterback de Nueva York quedó fuera durante su sexta temporada frente al equipo de la división este de la conferencia nacional.

La manera en que ha cambiado la NFL en cuanto a la toma de decisiones y maneras de actuar de algunos dueños sólo nos enseña que los tiempos han cambiado mucho, pero mucho desde los años donde la lealtad y la paciencia para desarrollar jugadores era lo primordial y rendía frutos para quienes sabían cómo hacerlo.

Lo anterior viene a colación de una noticia que cimbró a la Liga y a muchos jugadores que desde ahora pueden estar enterados de que en cualquier momento pueden ser desechados por su equipo por capricho de su propietario.

La decisión de los Gigantes de Nueva York, en este caso de la familia Mara, de deshacerse del quarterback Daniel Jones, fue de llamar la atención. Es increíble que para un jugador que fue visto como su futuro y cara del equipo, y a quien le dieron una extensión de contrato significativa al terminar la campaña de 2022, lo hayan marginado de tal manera que lo relegaron a la banca tras su mala temporada y terminarán por dejarlo en libertad en cuanto Jones así lo pidió.

De figuras a desechos

¿De verdad no valía ya nada para el equipo este chico llegado en 2019 a la organización? Al parecer no, y el argumento parece tener validez cuando vemos lo que la misma directiva hizo con el muy buen corredor Shaquon Barkley, al cambiarlo a Filadelfia, un rival divisional, y en donde el acarreador esta teniendo una temporada muy destacada.

Al parecer ahora mismo ya no importa si se le invirtió mucho a un jugador, ya no es un seguro de que permanecerá en ese equipo, ahora la regla parece ser: “funcionas siempre al más alto nivel o te vas”.

Existen casos específicos donde en realidad no se puede defender el accionar de un elemento como el caso de Deshaun Watson y su mega contrato con Cleveland, donde el pasador ha sido un gigantesco fracaso, pero el caso de Jones es realmente infame cuando la voz desde la oficina directiva dicta el adiós del jugador.

Jones tuvo sus buenos momentos con los Gigantes, los llevó a playoffs en 2022 después de una sequía larga, y ahora, en una campaña en que ha sufrido de más para liderar la ofensiva, la solución más práctica fue desprenderse de él.

¡Guauuuuuu! Que manera tan poco inteligente de ayudar a su equipo de los dueños, dejar ir a sus dos mejores jugadores ofensivos en los últimos años: Barkley y Jones. ¿Acaso nunca se preguntaron si acaso el problema radica desde el staff de coacheo, donde Brian Daboll parece perdió la chispa para liderar, tal y como le ha pasado a Doug Pederson en Jacksonville o Kyle Shanahan en San Francisco?

Los Gigantes son actualmente un monumento a la inoperancia ofensiva, sin dirección, tal cual como ocurre, curiosamente, con el otro equipo también de Nueva York, los Jets. A estas alturas el mismo Daboll debe estar consciente de que no regresará para la temporada siguiente, lo que acrecenta de manera mayúscula la curiosidad de saber quién se hará cargo del timón de los equipos de la Gran Manzana para el 2025.

Jones, al igual que Barkley, seguro encontrará rápidamente acomodo en algún equipo y tendrá una real oportunidad de mostrar su nivel una vez recuperada su confianza, lo que nos demostrará una vez más que la falla no es del jugador, sino de quien lo entrena, de quien lo guía.

El efecto canales en Carolina

Y ya que hablamos de los equipos sotaneros, pues que mejor que tocar lo que sucede en Carolina, donde el debutante coach, Dave Canales, quien hizo un gran trabajo como coordinador ofensivo en Tampa Bay hasta el año anterior, realmente le esta sacando agua las piedras al hacer que las Panteras mejoren semana ras semana.

El domingo anterior le dieron una dura batalla a Kansas City, y lo que más sorprendió fue que con Bryce Young en los controles; si, ese mariscal egresado de Alabama y quien le fue impuesto en su momento a Frank Reich cuando era el coach de Carolina, impuesto por el dueño David Tepper, otro extravagante del oficio de propietario.

Lo increíble es que el cambio que ha logrado imprimir en el juego y la confianza de Young, de quien se dijo iniciando la campaña que probablemente era la hora de negociarlo. Canales, como buen entrenador ofensivo, al parecer le esta encontrando la manera de jugar, y vaya que ha lucido Young, tal cual como lo hizo ante los Jefes de Kansas City.

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