Finalmente, este lunes Donald Trump asumirá la presidencia de los Estados Unidos y me parece oportuno señalar a los cuatro personajes más relevantes que lo estarán acompañando en su gabinete, cuentan con personalidad y liderazgo propio para poder enfrentar las mil y un batallas que planteó el candidato durante su campaña, los más destacados son Elon Musk, Marco Rubio, Robert Kennedy, y James D. Vance.
Robert Kennedy encabezará el Departamento de Salud y Servicios Humanos, es el político más osado en denunciar las políticas sanitarias implementadas durante la pandemia, el origen del virus, las letales consecuencias de vacunas, etc., motivo por el que fue duramente denostado y, sobre todo, censurado en medios de comunicación y redes sociales, pero que, en este nuevo periodo de gobierno, se espera sean reveladas las mentiras de los últimos 5 años y crece la expectativa de ver tras las rejas a los culpables de ello, por ejemplo, a Anthony Fauci, quien ocupó el cargo de la Director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, responsable de la implementación de las políticas sanitarias durante la pandemia, así como los reiterados anuncios de retirar el financiamiento a la Organización Mundial de la Salud y la expectativa de ir tras su Director General, el etíope Tedros Adhanom.
Asimismo, representa un cambio total de visión, pues llegará a destituir de su cargo a personajes como Rachel Levine, quien ocupa el cargo de Subsecretaria en el Departamento de Salud, un transgénero que promovió los bloqueadores de la pubertad o las llamadas operaciones de reasignación de género, entre otras tantas políticas que ahora tendrán un sentido totalmente opuesto.
Por otro lado, entra Elon Musk para crear y ser el titular del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental, quien ha confirmado que estará aplicando políticas libertarias inspiradas en Javier Milei, de Argentina, de achicar el gobierno, limitar las subvenciones y reducir los impuestos, aspecto que resulta sorprendente, ya que siempre los latinoamericanos esperaban a ver lo que hacía EUA para replicarlo en sus países y sería la primera ocasión en la que EUA se inspire en las políticas de Latinoamérica. Ahora bien, independientemente de lo polémico que resulta Musk, lo cierto es que para hacer frente a la elite globalista de George y Alex Soros, la familia Rockefeller, la familia Ford y Bill Gates se requiere de una fuerza que tenga esos tamaños para mover poder y dinero, quien lo ha encarnado es Musk.
Salvo que haya un gran despertar y trabajo diplomático extraordinario, resulta una mala noticia para la más reciente administración del gobierno de México, que el vicepresidente de EUA sea James David Vance, quien ha mencionado en reiteradas ocasiones su postura sobre catalogar a los cárteles como organizaciones terroristas y Marco Rubio ha sido seleccionado como futuro Secretario de Estado, quien no da legitimidad al proceso electoral de 2024 en México, por las amenazas a los candidatos a elecciones de cargo popular (a muchos de ellos los mataron) así como autoridades electas y periodistas asesinados por parte de los cárteles y por “aterrorizar a la población mexicana, socavando al gobierno mexicano y la soberanía de México”.
Así pues, resulta relevante darles seguimiento a estos cuatro personajes, ya que lideran temas claves que estarán en el centro de atención y tensión durante los próximos cuatro años.