
En 1990 leí con mucha emoción el libro de Jurassic Park, recién publicado por Michael Crichton. Tres años después sería una película superexitosa dirigida por Steven Spielberg que dio origen a una saga que continúa hasta la fecha. El centro de la novela era que un millonario había obtenido la secuencia de DNA de dinosaurios y a partir de ahí había logrado la de-extinción de varios de ellos. No me extrañó cuando supe que Crichton había estudiado antropología y medicina en Harvard y luego un posdoctorado en virología. Con este conocimiento y la habilidad para generar novelas, el resultado fue explosivo. Crichton, por cierto, fue también el creador de la serie ER para televisión.
La semana pasada, una noticia que dio la vuelta al mundo, reveló que la idea atrás del Parque Jurásico ya nos alcanzó. Lo que en 1990 era una novela de ciencia ficción, hoy se vuelve realidad. Un millonario atrás de la de-extinción de una especie.
Una empresa en Dallas llamada Colossal Biosciences dio a conocer que trajeron de vuelta el extinto lobo terrible o lobo húngaro (Dire Wolf en inglés). Este lobo blanco, que se volvió famoso por la serie Game of Thrones, se extinguió hace unos 13 mil años. Era un habitante del norte de América, gran carnívoro que, presumiblemente, se extinguió después de que desaparecieron los grandes mamíferos, por lo que perdió su fuente de alimento.
En 2021, científicos lograron extraer el DNA del lobo terrible, sin que estuviera contaminado con el de otras especies, a partir de un diente del lobo encontrado en Ohio y de un cráneo encontrado en Idaho, que datan de hace unos 13 mil y 72 mil años, respectivamente. La secuencia reveló que el DNA de este lobo es 99.5 % idéntico al del lobo gris que actualmente vive. Entonces, utilizaron la tecnología de CRISPER para edición de genes y con una serie de mutaciones, convirtieron la secuencia del DNA de lobo gris, en DNA de lobo húngaro. Finalmente, tomaron óvulos recién fecundados de loba gris y les cambiaron el núcleo, por el de las células en cultivo que editaron previamente. Muy similar a lo que se hizo hace muchos años con la oveja Dolly. Como en el núcleo está el DNA, el desarrollo de los embriones en la loba gris resultó en lobos húngaros. Tres lobos nacieron en 2024 y la semana pasada fueron revelados por primera vez por la empresa. Dos tienen ya seis meses y una más tiene dos meses. Los machos se llaman Rómulo y Remo, por los fundadores de Roma, que, según el mito, fueron criados por una loba y el tercero, la hembra, lleva el nombre de Khaleesi, el personaje femenino más emblemático de la serie Game of Thrones. Son unos lobos blancos hermosos.
Si el puro hecho es fascinante, la historia de la empresa que está haciendo esto también lo es. Ben Lamm un empresario americano de 43 años que ha hecho miles de millones de dólares fundando empresas, se asoció con un científico de Harvard llamado George Church que le propuso como objetivo traer a los mamuts de vuelta, mediante de-extinción. Lamm convenció a varios millonarios de invertir en esta empresa que inició con 16 millones de dólares y hoy tiene un valor de 10 mil millones. En ella trabajan científicos del más alto nivel. Su primer éxito es el lobo húngaro, pero tienen grupos trabajando en la de-extinción de otras especies como el mamut lanudo, el dodo y el tigre de Tasmania.
Dr. Gerardo Gamba
Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán e
Instituto de Investigaciones Biomédicas, UNAM