Esta mañana, en el majestuoso escenario del Museo Nacional de Antropología e Historia, se llevará a cabo la entrega del Premio Crónica. Lo reciben tres destacados compatriotas: Elisa Carrillo, Carlos Coello, Eusebio Juaristi y la Universidad Autónoma de Querétaro.
El Premio Crónica se instituyó en el año 2010. En ese entonces, don Jorge Kahwagi Gastine y Rafael García Garza consideraron necesario reconocer la trayectoria de mexicanos que han hecho aportaciones extraordinarias al país en los campos de la ciencia, la cultura y la comunicación.
La idea era evidenciar que México saldrá con banderas desplegadas del desafío cruel de la violencia, y cualquier otro reto, porque hay entre nosotros personas, con pleno reconocimiento nacional e internacional, que enarbolan valores que compartimos, como el respeto irrestricto a la dignidad humana, al trabajo honesto, perseverancia, solidaridad y esa característica tan mexicana de levantarse más fuertes después de cada caída.
La entrega del Premio Crónica ocurre en un momento particularmente complejo para el país y para el mundo, lo que muestra con nitidez la conveniencia de colocar en primera plana a las personas que se dedican al arte, a la ciencia, a la divulgación cultural, a los aliados de la vida.
Que alguien haga política
Los trabajadores del Poder Judicial movilizados en defensa de sus derechos laborales y la policía capitalina que intenta limitar las afectaciones a la ciudad, tienen la obligación de bajarle dos rayitas a su rijosidad antes de que ocurra algo que todos lamentemos. Tanto va el cántaro al agua hasta que se quiebra.
Hay desgaste de los cuerpos antimotines y de la percepción de los ciudadanos sobre la causa que defienden los trabajadores afectados por el plan de desaparecer fideicomisos.
La oposición en pleno respalda la causa de los trabajadores, por ahí hay una vía de solución que no suponga el riesgo creciente de hechos violentos. Hay que trabajar en el Congreso.
Se requiere darle una oportunidad a la política. Los legisladores están para eso, para negociar, para encontrar salidas, pero hay algunos que quieren cerrar las puertas y burlarse de sus adversarios.
Morelos, rodadas demoniacas
La delegación de la Canaco-Servytur en Morelos denuncia que en regiones del estado, como Huitzilac, no hay ninguna autoridad que haga valer la ley.
Ni el gobierno del estado a cargo de Cuauhtémoc Blanco, ni los alcaldes emanados de diversos partidos han estado a la altura de las circunstancias
Rodrigo Luna, presidente del organismo empresarial, denunció de nuevo que la carretera a la altura de Tres Marías es utilizada como pista de carreras por los motociclistas que ponen en riesgo vidas y lo hacen de manera impune.
La inseguridad en Huitzilac está acabando con el turismo. Ya nadie quiere circular por esos caminos. El deterioro de las instituciones encargadas de brindar seguridad en Morelos es evidente y los grupos delictivos actúan sin contrapesos.
La clave para revertir la situación está en la participación ciudadana, sobre todo en las urnas donde podrán rechazar a quienes les han fallado.
Cuitláhuac García con Sheinbaum
Retomaron fuerza en Veracruz las versiones de que el gobernador del estado, Cuitláhuac García, pedirá licencia al Congreso local para sumarse al equipo de campaña de Claudia Sheinbaum.
No es la primera vez que se dice, aunque no queda claro si el origen de la versión está en el equipo de la doctora Sheinbaum, o si es el propio equipo del mandatario veracruzano quien se está promoviendo para ver si le tiran un lazo.
Es claro para todos que Cuitláhuac quiere dejar la costa y trabajar en el altiplano. Ni allá ni aquí se tiene noticia clara de los méritos que tiene para ser reclutado.
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