LIC. ADÁN AGUSTO LÓPEZ,
SECRETARIO DE GOBERNACIÓN:
Si algún proyecto lopezobradorista pude ver con buenos ojos es el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT), construcción anhelada por más de un siglo. No obstante, me temo que vaya a salir más caro el caldo que las albóndigas.
El viernes, Grupo México (GMXT) -el cuarto grupo empresarial del país- se desayunó con el decreto presidencial mediante el cual el gobierno federal se adjudica el uso temporal de su Ferrocarril del Sureste, sin especificar qué se debe entender por temporal.
No conozco a Germán Larrea y nunca he tenido tratos con GMXT; aunque es un grupo pujante, le tengo recelo a partir de dos desastres provocados por su rama minera: el colapso de Pasta de Conchos y el derrame tóxico en los ríos Bacanuchi y Sonora, causado por la mina Buenavista del Cobre.
Dicho lo anterior, resulta reprobable el decreto emitido el pasado 19, a favor del FIT. Entre las justificaciones está “que la asignación otorgada a FIT no comprendió en la operación y explotación de las líneas Z y FA, el acceso directo, fluido y natural al puerto de Coatzacoalcos de los ferrocarriles y trenes de dicha empresa paraestatal, lo que interrumpe su libre tránsito en dichas líneas férreas (…) para los procedentes de Salina Cruz, y en El Chapo, para los procedentes de Palenque.” Mmmhhh…
¿Error de diseño? ¿De planeación? ¿De las dos?
En su comunicado de ayer, GMXT afirma que desde principios de 2022 se acordó con la SEGOB y la SCT la construcción de una segunda vía para el uso del FIT, obras que se iniciaron de inmediato con un gasto de “varios millones de pesos” a costa del Grupo. He de suponer que esa segunda vía no está concluida, porque “no es enchílame la otra”. Así que tal y como están las vías hasta ahora, se obliga al FIT “a detener el movimiento de los ferrocarriles y trenes antes de ingresar a las vías concesionadas a Ferrosur, (…) a solicitar la autorización correspondiente y a pagar derechos de paso, lo que ocasiona afectaciones económicas y de programación operativa a dicha entidad.
¡¿A poco no sabían que debían solicitar autorización para pasar?!
La línea Ferrosur es muy transitada debido a que, como usted mismo dijo, licenciado López, por ahí se transporta toda clase de mercancías; ni modo que se detengan los vagones solo para dar paso franco a los FIT a la hora que quieran. Para mí que no calcularon bien ni el tiempo, ni el costo de construción de esta megaobra…
Ya deberíamos estar acostumbrados a que el presidente se guía por encargos y no por las funciones en las que cada dependecia es experta. Yo no me acostumbro y me preocupa sobremanera que ahora los marinos estén a cargo de la construcción del FIT. Una cosa es su experiencia con los puertos y otra que conozcan cómo se construye y se opera un ferrocarril. No me sorprendería que en las próximas semanas o meses se interrumpa el flujo de mercancías, en lo que SEMAR aprende a operar las líneas, los almacenes, las cargas, etc…
Dentro de las justificaciones que usted dio al mentado decreto, es que en la zona recorrida por el Ferrosur se hacen trabajos de inteligencia para el espacio aéreo, pues ahí hay varias bases militares y una naval. ¿Hace cuánto están ahí y hasta ahora les afecta..?
Entre el decreto y sus declaraciones, don Adán, uno no puede menos que concluir que están viendo que no concluirán la obra para que sea inaugurada por López Obrador. Y pues ni modo, a darle prioridad a los trenes del FIT por encima del resto…
Estos caprichos son caros y llegan en el peor momento económico; hoy que las grandes empresas están ocupadas con la relocalización de sus plantas, siendo México un lugar muy atractivo, la 4T sale con un decreto que evidencia la falta de respeto al Estado de Derecho en nuestro país, pues no hay límites al poder gubernamental.
Le recuerdo que durante los tres últimos años México descendió todavía más en el Índice de Estado de Derecho que mide el World Justice Project: de 140 países, estamos en el lugar 115 con una calificación de 0.42 de un máximo de 1.0.
Tal medición es una alerta roja para los inversionistas, señor secretario, porque simplemente nadie pone su dinero donde se lo puedan hacer polvo.
Así que le pregunto, ¿qué clase de fortaleza económica y generación de empleo nos va a dejar el lopezobradorismo, si se la pasa ahuyentando la inversión privada?
Colaboró: Upa Ruiz uparuiz@hotmail.com
Correo: Lmendivil2010@gmail.com
Facebook: Leopoldo Mendívil
Twitter: @Lmendivil2015
Copyright © 2023 La Crónica de Hoy .