Mi querida Myrna Ortega, hoy tristemente viuda del escritor Ignacio Solares, quien fuera un gran amigo literario, un conversador excelente y divertido y que escuchó algunas veces mis disquisiciones budistas, mi negación de un ser superior, me envío hace un par de semanas un libro nuevo de Nacho, Novelista de lo invisible, conversaciones con José Gordon. Solares me publicó ensayitos, historias y reseñas en la Revista de la UNAM, no pocas veces, y le gustaban realmente mis textos. Yo lo admiraba, lo admiro, porque es (en presente) un escritor estupendo. Leo Novelista de lo invisible con muchas interrupciones: tres nuevos cursos en la Facultad de Filosofía y Letras, uno de teoría, otro de narrativa de hoy y el tercero de poesía también actual. Escribo guiones, una biografía y padezco una detestable pachorra matutina que me sienta en el sillón de mi habitación a leer la prensa durante varias horas, todavía en pijama y atajada por la culpa, por no funcionar como las personales normales que se bañan temprano y corren a trabajar.
Toda esta introducción proviene de la promesa que hago aquí para escribir la semana que entra sobre el último libro del gran Ignacio Solares, narrador sui generis que recibió importantes premios literarios y que es uno de mis escritores mexicanos favoritos.
Habiendo pasado por la ducha y casi arreglada, frente al maremágnum de la política mexicana en estos días, me preocupa, lo enuncié en mi artículo de la semana pasada, cómo reaccionará en junio de 2024 el presidente Andrés Manuel López Obrador ante una posible victoria de la oposición. ¿ Qué tantos chanchullos prepara desde ahora para que su corcholata favorita, Claudia Sheimbaum, su hija política, tan apegada a sus ideas, tan fundamentalista del obradorismo, gane la elección presidencial el año que entra? La doctora Sheimbaum ha gastado, según una investigación de Latinus, más de 32 millones de pesos, cantidad muy superior a los 5 millones que determinó dar Morena a sus corcholatas. Sin duda es “la tapada destapada” de López Obrador. ¿Cómo la defenderá en las elecciones del año que entra, cómo la impondrá, si es que la oposición, seguramente abanderada por Xóchitl Gálvez, le gana?
Supongo que el presidente la veía más fácil antes del lanzamiento de Xóchitl. Ahora se le complica. Así es la vida, siempre sorpresiva. Sabemos que Beatriz Paredes, una política consolidada e inteligente, va en desventajada en el Frente Amplio, hoy sólo representado por ella y por Xóchitil, ya que este miércoles 30 de agosto, hacia las dos 2:00 de la tarde, la ponderación de la encuesta del Frente da 57.6% a Xóchitl y 42.4 % a Beatriz. Lo más seguro es que Xóchitl Gálvez quede sola en la boleta, pero a mí me gustaría que también estuviera Beatriz Paredes. Me parecería más justo y más interesante para una coalición que se juzgaba imposible pero que se formó. Volando en el aire viene a la cola del Frente y de Morena, Movimiento Ciudadano. Un partido que se presentó como una novedad de centro izquierda, que apareció en 1999 como Convergencia por la Democracia. En 2002 se acortó el nombre a Convergencia y en 2011 devino en Movimiento Ciudadano. Se le unieron personas sumamente respetables, por ejemplo Patricia Mercado, economista y hoy senadora, que se había postulado como candidata a la presidencia de la república por el partido Alternativa Socialdemócrata. Este Partido no consiguió su registro definitivo. Salomón Chertorivski Woldenberg, también economista, se desempeñó como Secretario de Salud, y es integrante de Movimiento Ciudadano y hoy funge como diputado. Conozco a otro de los integrantes, a Rodrigo Cordera, hijo del eminente economista Rolando Cordera. El presidente del partido, Dante Delgado coordina a la bancada de MC en el senado. Fue gobernador interino de Veracruz y embajador de México en Italia. No sé mucho más de él. La propuesta de su partido me gustaba y, por una u otra razón no me cerqué al Partido Naranja, pero quise hacerlo. Hoy me irrita la obcecación que los detiene a todos ellos para no adherirse a la coalición del Frente Amplio por México. Como han podido, limando asperezas y asumiendo una postura realmente democrática, PAN, PRI y PRD han comprendido que sólo juntos podrán contra el aparato triturador de MoReNa para las próximas elecciones. En cambio, Movimiento Ciudadano aguarda a que surja de su Partido la persona idónea para la presidencia o simplemente se alió ya con el Partido oficial. Porque ¿ a quien espera, a un Godot , que es como el mismo dios que no aparece en Esperando a Godot, obra de teatro del absurdo de Samuel Beckett? Como dijo un historiador, amigo mío de X(uitter), autor de Los últimos honores. Funerales presidenciales en México 1945—2012, seguramente Dante Delgado aguarda a que regrese Quetzalcóatl para proponerle la candidatura por Movimiento Ciudadano.
En otro orden de asuntos, el levantamiento de las encuestas organizadas por MoReNa para escoger a la corcholata favorita, es decir, la que habrá de definir al ganador (a) de la contienda interna para candidato presidencial, inició mal. Los sondeos comenzaron en una atmósfera de suspicacia entre los representantes de los contendientes y muy “hermanados” morenistas que López Obrador lanzó al ruedo para la candidatura presidencial por Morena en el 2024. Quien pierda tendrá su premio de consolación, pero, entretanto Mario Delgado, presidente del Partido, y Citlali Hernández, la joven secretaria de MoReNa, los representantes de los aspirantes, los encuestadores (por cierto, a mí nadie me ha llamado nunca) y no sé cuántos más tratan de resolver el desorden en la preparación de la encuesta. Para subsanar el problema se ha ampliado un día más la indagación, aunque creo que todos sabemos el resultado de antemano.
Mientras escribía esto, Beatriz Paredes se ha “bajado” de la contienda. Xóchitl Gálvez es la aspirante oficial del Frente Amplio, según lo ha declarado Alejandro Moreno, dirigente nacional del PRI, hace unos minutos.
Señoras y señores, está por principiar en el 2023 el año electoral 2024.
Copyright © 2023 La Crónica de Hoy .