BúsquedaSe dice que en Palacio Nacional hay gente preocupada por el encontronazo entre la 4T y la jerarquía católica por la estrategia de seguridad denominada “Abrazos, no balazos”.
Tal vez, pero el presidente López Obrador no es uno de los preocupados. Al contrario, el choque le da material de sobra para todas las mañaneras de esta semana y tal vez de la siguiente.
El político tabasqueño es hábil para el forcejeo cuerpo a cuerpo donde nunca pierde y cuando pierde, arrebata.
La iglesia es poderosa y tiene, en el terreno, un ejército que puede arrollar a los Servidores de la Nación. Es un adversario formidable.
Justo, dicen quienes lo conocen, lo que el presidente estaba esperando. Pelearse con periodistas o políticos le aporta poco a su afán de trascendencia. Pelearse con la jerarquía le asegura un lugar en las monografías.
Fue excluido de Paraíso. Al senador Ricardo Monreal no se le vio en las fotos de la inauguración de los jardines y las oficinas de la refinería de Dos Bocas.
Unos días antes había demandado poner fin a la exclusión, pero su petición al parecer no tuvo eco. En el presídium sí aparecieron otras corcholatas, las que están, según se dice, más cerca del ánimo presidencial.
Pero el zacatecano no se amilana y sigue. La opción de ser el contrapunto ya toma cariz de necesidad.
Unas horas después del desencuentro con la comunidad judía, Monreal firmó un acuerdo de colaboración entre el Senado y el Museo de la Memoria y la Tolerancia para erradicar el discurso de odio. ¿Para erradicarlo de dónde?
El domingo se le vio en su tierra, Jerez, que padece la saña del crimen organizado. Ahí el senador reiteró que la estrategia actual debe revisarse.
Es cierto que hay que atender las causas profundas, pero si se desatiende el momento presente, no hay avance.
El Frente Cívico Nacional tiene un objetivo central: construir una candidatura presidencial única que haga frente a Morena en el 2024.
Es mucho más fácil plantearlo que hacerlo. Dentro de los partidos hay fuerzas poderosas que tienden a la dispersión y que cada día ganan más espacios.
Hay quien busca poner énfasis en las diferencias y no en las coincidencias. El Frente sabe que lograr la candidatura única será el primer paso. El segundo, lo reconocen ellos mismos, es vencer el abstencionismo, que según se vio en las elecciones de junio, es una bestia enorme que pisa fuerte
La ecuación es: mientras más personas salgan a votar, mayores serán las posibilidades de triunfo de la oposición.
Son parte del Frente, Guadalupe Acosta Naranjo, Demetrio Sodi, Fernando Belaunzarán, Cecilia Soto, Ruth Zavaleta, Carlos Navarrete, Álvarez Icaza, Torres Landa, entre otros.
Hay experiencia, ya se verá si también liderazgo.
Después de Creel
Dicen que en el bunker del PAN en la colonia Del Valle se esperan para los próximos días más auto destapes para el 2024. Hay varios que no quieren que Santiago Creel se vaya solo y se les escape.
Entre los aspirantes hay de todo, comenzando por una larga lista de gobernadores en funciones: Mauricio Vila de Yucatán, Mauricio Kuri de Querétaro, Diego Sinhue de Guanajuato, Maru Campos de Chihuahua, y Cabeza de Vaca, de Tamaulipas.
Está también, en algún lugar del mundo, Ricardo Anaya. Se habla además de Romero Hicks, Lilly Téllez y Francisco Domínguez, más los que levanten la mano.
Ya no es tiempo sólo de mencionar nombres, los interesados deben comenzar a trabajar y el partido a medir los alcances reales de cada quien. Porque una cosa es querer y otra, distinta, poder.
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