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Reciben Juan Pablo II a 160 rabinos de todo el mundo

El papa Juan Pablo II recibió hoy en audiencia a 160 rabinos de todo el mundo que le agradecieron por su labor a favor del diálogo entre cristianos y hebreos.

(La Crónica de Hoy)

El papa Juan Pablo II recibió hoy en audiencia a 160 rabinos de todo el mundo que le agradecieron por su labor a favor del diálogo entre cristianos y hebreos.

Durante el encuentro, celebrado en la sala Clementina del Palacio Apostólico, el pontífice reiteró la necesidad de aumentar la comprensión entre los pueblos para alcanzar un "mundo de paz".

En su breve discurso en inglés, Juan Pablo II recordó que este año se celebra el 40 aniversario de la declaración del Concilio Vaticano II "Nostra Aetate" que "ha contribuido significativamente a la consolidación del diálogo entre hebreos y católicos".

El papa se manifestó a favor de que este encuentro "pueda ser una ocasión para renovar el compromiso y aumentar la comprensión y la cooperación al servicio de la construcción de un mundo más sólido, basado en el respeto a la imagen divina y a todo ser humano".

Además, invocó "la abundante bendición del Omnipotente" para los rabinos, quienes recitaron la bendición de la Biblia reservada a los jefes de sacerdotes. Con el "Shalom aleichem" el papa se despidió de sus huéspedes.

Antes, Gary Krupp, presidente y fundador de "Pave the Way", organismo que reúne a los rabinos de todo el mundo, dirigió un discurso de agradecimiento al papa.

El rabino Jacques Bemporad, director del Centro para la Comprensión Interreligiosa de Nueva Jersey, dijo que se trató de "un día muy importante" que hay que interpretar como señal de "voluntad recíproca de comprender el uno al otro y encontrar modos de trabajar juntos".

"Es la primera vez que rabinos, en calidad de rabinos jefes, vienen a agradecer personalmente al papa por lo que ha hecho", destacó.

Recordó la visita del papa a la Sinagoga de Roma, en la década de los años 80, su "gran valentía" al establecer relaciones entre el Vaticano e Israel y el "mea culpa" pronunciado durante el Jubileo por los pecados cometidos por los católicos contra los judíos.

"Ningún papa antes de Juan Pablo II ha hecho tanto y se ha preocupado tanto de crear una relación fraternal entre católicos y hebreos", resaltó.

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