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Seguro de que actuó correctamente al ordenar la extradición a Estados Unidos de 14 jefes paramilitares, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, aseguró ayer que no habrá impunidad tras cumplir con esta medida y advirtió con esta acción a los jefes de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que la fuerza pública continuará en su persecución.
Al aludir a los 14 ex comandantes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) extraditados el martes, Uribe recordó, durante una graduación de policías, que por acuerdo con EU toda la riqueza ilegal de estas personas en ese país irá a un fondo de reparación de las víctimas.
También se acordó que se facilitará el acceso a las pruebas judiciales requeridas en Colombia, con el fin de llegar a conocer la verdad de los delitos cometidos por los paramilitares extraditados.
Según el gobernante, los grupos paramilitares en su país “surgieron de las guerrillas y del descuido del Estado”. Luego agregó: “hoy no hay descuido del Estado, pero quedan guerrillas”.
A esas organizaciones armadas ilegales, advirtió, “hay que derrotarlas totalmente”. en esa empresa, “tenemos fe”.
INCERTIDUMBRE. Por otra parte, la suerte de las víctimas de las AUC se convirtió en el centro de las preocupaciones, que despertó la extradición a EU de los ex jefes de esa desmovilizada organización paramilitar.
Con la masiva extradición “queda desamparado el tema de las víctimas”, consideró el procurador general, Edgardo Maya, aunque reconoció que el presidente Uribe tomó la decisión en uso de una facultad discrecional.
El jefe del Ministerio Público explicó a emisoras locales de Bogotá que el frente de víctimas “queda un poco en el limbo por la información valiosa en la memoria que hay de estas personas que han sido extraditadas, que pueden contribuir eficazmente al primer elemento de la Ley de Justicia y Paz, que es la verdad”.
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