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La periodista cultural Merry MacMasters recibió el Homenaje Nacional de Periodismo Cultural Fernando Benítez en la 38° Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
“Estoy convencida de que la cultura y el arte sí curan corazones, esa ha sido mi experiencia a lo largo de 44 años y desde antes porque mi cercanía con el ámbito periodístico se remonta a mi niñez”, declaró la homenajeada.
Para ella, esta ceremonia que se celebra anualmente es una distinción para el gremio periodístico y para los reporteros de a pie, “como se dice los que andamos detrás de la noticia a diario”.
En ese sentido, Merry McMasters compartió un recuento de la vida periodística cultural mexicana, desde su propia trayectoria.
Sus inicios en Radio UNAM quedaron registrados en una grabadora de cintas magnéticas, que se editaban en el estudio de la radiodifusora.
Un par de años después, como reportera de la sección cultural del desaparecido periódico El Nacional ya trabajaba con una grabadora pequeña, de pilas y cassettes normales.
“Hasta hace mucho usé todavía una mini grabadora, con mini cassettes. Ya para cuando entré al periódico La Jornada, en 1994, había empezado a hacer mis pininos en la computadora que todavía era muy rudimentaria”, relató sobre su paso en el reporteo.
“En mis primeras coberturas fuera de la ciudad de México enviaba mis notas por teletipo, hablo de los años 80 del siglo pasado. También llegué a dictar mis notas por teléfono, porque luego resultaba que las personas que manejaban el teletipo tenían un horario que solía ser por la tarde a una hora demasiada demasiada avanzada para las secciones culturales de la capital, cuyo cierre de edición suele ser de adelanto”, continuó.
¿Qué es teletipo?
“Un dispositivo telegráfico de transmisión de datos ya obsoleto, utilizado durante el siglo XX para enviar y recibir mensajes mecanografiados, punto a punto, a través de un canal de comunicación simple, a menudo a un par de cables de telégrafo”, recordó Merry McMasters.
La invención del fax fue todo un acontecimiento en el mundo reporteril, qué decir del internet y envío de archivos por correo electrónico.
“Me acuerdo muy bien de la primera vez que mandé una nota así”, indicó la homenajeada.
“Como se habrán dado cuenta, con el paso del tiempo la tecnología iba volviéndose cada vez más fácil y rápida en la manera de trabajar. Eso tiene sus pros y sus contras porque en la actualidad los jefes quieren todo rápido, casi al grado de querer la nota escrita antes de que termine el evento … y no exagero”, agregó.