El doctor José Alberto García Aranda fue reconocido con la presea Académico Mario A. Torroella, una distinción reservada a quienes, en su dedicación a las ciencias médicas, ha beneficiado a los niños como principales pacientes.
El reconocimiento fue otorgado por la Academia Mexicana de Pediatría el viernes pasado y ha resultado muy significativo que el galeno elegido sea uno de los que han servido al frente del Hospital Infantil de México Federico Gómez, pasando por prácticamente todos los cargos directivos y de enseñanza en este hospital que es ejemplo a nivel mundial.
García Aranda dirigió el Hospital Infantil de 2013 a 2019, siempre con un compromiso palpable de fortalecer la atención médica e investigación destinadas a reducir los principales problemas de salud que afectan a la población infantil mexicana.
Al doctor García Aranda no le pasó desapercibido en esos años que el sobrepeso y la obesidad se instalaban como problemas principalísimos para niños menores de 10 años, por lo que enfocó una parte importante de las tareas del Federico Gómez a atenderlos.
El doctor García Aranda es Médico Cirujano egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México y realizó su residencia en Pediatría General justamente en el Hospital Infantil de México.
Se desempeñó también como Jefe de Residentes, Jefe de la División de Enseñanza, Subdirector de Asistencia Médica, Director Médico y Director General.
En una entrevista con Crónica en el año 2022, el doctor José Alberto García Aranda resumió su labor en la medicina como algo que se tornaba más satisfactorio al transmitir el conocimiento a las nuevas generaciones de médicos, “la enseñanza es el cambio en el ser humano, sea de pensamiento, de obra… y si con la educación logramos cambiar a un estudiante, ya con eso la hizo uno”.
Esas palabra resumen muy bien casi 50 años de atención a niños, en la formación de nuevos profesionales de la salud en el Hospital Infantil de México Federico Gómez, donde ocupó todos los cargos de relevancia, “la pasión y gusto por ayudar todos los días a los otros, porque sin pasión, nada hay”.