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“Bebidas azucaradas matan más mexicanos que el crimen organizado”: Calvillo

El Poder del Consumidor solicitó a Cofepris a que reconozca a las bebidas azucaradas o endulzadas como un producto de riesgo para la salud en nuestro país · México es uno de los mayores consumidores de estas bebidas: Alejandro Calvillo

alerta sanitaria

La distribución y publicidad de refrescos y bebidas azucaradas en México es un gran problema, señala la organzación.

La distribución y publicidad de refrescos y bebidas azucaradas en México es un gran problema, señala la organzación.

Cuartoscuro

En México, 40 mil 842 muertes se relacionan con el consumo de refrescos, bebidas azucaradas o endulzadas con edulcorantes. De acuerdo con el estudio “Mortality attributable to sugar sweetened beverages consumption in Mexico: an update”, publicado en “International Journal of Obesity” el 2019, 23 mil 433 decesos (57%) son a causa de la diabetes, es decir, el 35.6% de todas las muertes por diabetes en México; 13 mil 517 (33%) son causadas por enfermedades cardiovasculares, el 12.7% de todas las muertes por esta causa y 144 (-1%) ocasionadas por diferentes tipos de cáncer asociados a la obesidad.

“Estas bebidas matan a más mexicanos que el crimen organizado” (en 2023 fueron alrededor de 30 mil homicidios, de acuerdo a cifras oficiales), señala Alejandro Calvillo, director de la organización civil El Poder del Consumidor, que solicitó a la a Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) declarar estos productos como de riesgo para la salud.

Esta alerta debe incluir a las bebidas con edulcorantes no calóricos y debe considerar el carácter adictivo de estos, en especial los que tienen cafeína, dijo Calvillo. “Los edulcorantes no calóricos presentados como alternativas a los azúcares significan diversos riesgos a la salud, lo que ha llevado a la OMS a recomendar que no sean consumidos”.

En conferencia, Calvillo y miembros de la organización presentaron nuevamente datos científicos que exponen los daños a la salud de las bebidas endulzadas, el creciente consumo en nuestra población desde edades preescolares y el impacto en la mortandad de los mexicanos.

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OPINIÓN DE EXPERTOS.

En el encuentro, realizado en un hotel de la capital, reprodujeron un video con la opinión de una decena de científicos (as) y expertas en salud y el impacto del consumo de estos productos.

“Ha quedado claro que el consumo de bebidas industrializadas, como los refrescos, es un determinante importante de esta crisis de salud que ha provocado tanto dolor y daño al país: se consumen alrededor de 160 litros per cápita al año por lo que, de continuar así, no habrá servicios de salud que puedan con la demanda de atención”, dijo Simón Barquera, director del Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

El también presidente electo de la Federación Mundial de Obesidad, con más de 20 años investigando la epidemia de obesidad y enfermedades crónicas en México, refirió también que en el país mueren más de 40 mil personas cada año sólo por el consuno de refrescos. “Por eso se debe emitir una alerta sanitaria por riesgo por el consumo de este tipo de productos altamente nocivos para la salud y desarrollar acciones urgentes que permitan reducirlo cuanto antes”.

Abelardo Ávila Curiel es investigador del Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas Salvador Zubirán (INCMNSZ), especialista en medicina social y epidemiología. A lo largo de las últimas décadas ha sido uno de los científicos que han alertado la gravedad de la crisis epidemiológica por obesidad y diabetes en el país; realizó activismo con organizaciones civiles en épocas donde pocos científicos de institutos de salud se atrevían a hablar por miedo a represalias.

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Liliana Baena, de la organización El Poder del Consumidor, refirió la estimación basada en análisis del INSP.

En su participación en el video, recordó que, en las últimas tres décadas, México ha padecido una grave epidemia de obesidad y sus daños colaterales sobre todo por el síndrome metabólico y la diabetes mellitus, ocasionado más de 1 millón de muertes a lo largo de este siglo.

“Sin duda esto se asocia con el consumo de bebidas edulcorantes que tenemos en México, principalmente entre la niñez. El daño que provocan está fuera de toda duda, ya que la evidencia científica es contundente; por ello, es importante que las autoridades tomen medidas inmediatas y eficientes de alarma epidemiológica para controlar esto. Hacemos un exhorto a las autoridades…”.

Por su parte, Laura Moreno, profesora e investigadora de la Facultad de Medicina de la UNAM, especializada en alimentación y salud, dijo que la declaración solicitada a Cofepris es imperativa e impostergable, dados los efectos provocados por la gran cantidad de azúcares que tienen estas bebidas, así como aditivos químicos como colorantes y otros como el ácido fosfórico.

Recientemente, expuso, se ha estudiado el efecto de estos componentes en la microbiota intestinal, pilar esencial de la salud humana, y se ha observado que altera a sus microrganismos benéficos. “En particular, se afecta el eje intestino-cerebro, dando lugar a que estas bebidas sean consideradas adictivas. Hay mucho que investigar al respecto, pero hasta el momento hay evidencias fuertes de que estas bebidas juegan un papel fundamental en estos problemas que nos aquejan”.

PODER ECONÓMICO

Alejandro Calvillo.
Alejandro Calvillo enfatizó que no hay ningún producto en el mercado –a excepción el tabaco y alcohol– que generan tanto daño como las bebidas endulzadas e, incluso, hasta más. “México es uno de los mayores consumidores de estos productos, que tienen la mayor red de distribución en todo el país hasta convertirse en los más accesibles: hay regiones donde es más fácil conseguir una Coca cola que agua”. Esto se debe a su vez, agregó, porque cuentan con la mayor inversión publicitaria que cualquier otro producto en el país. Esto significa que las corporaciones adquieran un gran poder económico y político, encabezado grandes alianzas de grupos empresariales como el Consejo Coordinador Empresarial, añadió. “Todo ello se traduce en un gran poder persuasivo que impide a la población tener una percepción real de los daños de estas bebidas. Una población ahogada en una publicidad que vincula el consumo de estos productos con la felicidad, juventud y el deporte, no con deterioro dental, obesidad, síndrome metabólico, diabetes, hígado graso y cardiopatías”.

INGREDIENTES SECRETOS DE LA COCA.

De acuerdo con Gabriela Guzmán, abogada de la organización civil, para solicitud ante Cofepris se empleó la figura de Acción popular/denuncia sanitaria que permite a cualquier persona solicitar al órgano de gobierno investigar y, eventualmente, advertir sobre los riesgos que pueda presentar algún producto o servicio.

“La solicitud busca que, como medida cautelar, la Cofepris emita una alerta sanitaria: un aviso formal a toda la población de que el consumo de estas bebidas azucaradas representa un riesgo para su salud. Adicionalmente, se solicita que investigue si producen dependencia (…) así como aquellos ingredientes que empresas solo presentan como 'saborizantes' sin saber qué sustancias son y decir qué riesgos tienen”.

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Los productos comestibles ultraprocesados y bebidas endulzadas están marcadas por un etiquetado claro, como resultado de la NOM051.