El cantante Víctor Manuel cree que la tauromaquia, de nuevo en el debate por la supresión del Premio Nacional español, “se extinguirá sola sin que nadie la empuje”, aunque de momento disfruta de unas subvenciones “de cojones” y “de las que nadie habla” cuando se critican las “paguitas” en la cultura.
En una charla con EFE con motivo de la publicación del disco sinfónico que grabó durante su gira de 75 aniversario, el músico se califica a sí mismo como “amortizado” desde el punto de vista de la polémica y no tiene reparo en opinar sobre algunos temas de actualidad.
Así, dice que “es mentira” que el mundo de la cultura se acerque a la izquierda para ser subvencionado: “Aquí hay tanta gente de derechas como de izquierdas. Hay mucha gente convencional y, sobre todo, gente que no quiere saber nada de nada de lo que pasa”, reflexiona.
Preguntado por la retirada del Premio Nacional de Tauromaquia, remarca que “Sumar (partido del ministro de Cultura español, Ernest Urtasun) no engaña a nadie”, ya que era conocida su postura contraria a las corridas de toros.
Él cree que en todo caso “es algo que se extinguirá solo sin que nadie lo empuje”, como ocurrió ya en muchas plazas, “y seguramente, si hubiese menos dinero para pagarlo, también desaparecerían otras”.
“Mantener una plaza de toros en ciertas ciudades de España con seis corridas al año me parece un exceso, ¿quién paga esto?”, se pregunta, y recuerda cuando coincidió con un realizador de televisión que le dijo que no enfocan los tendidos “porque nunca hay nadie”.
Tras cinco décadas de trayectoria musical exitosa, Víctor Manuel tiene multitud de anécdotas que relatar, como la ocasión en la que su amigo Luis Alegre organizó una velada en casa del músico Joaquín Sabina porque los entonces príncipes Felipe y Letizia querían conocer a un grupo de artistas.
“No fue una fiesta, fue una convocatoria muy restringida de unos cuantos. Fue una reunión muy agradable, de una cena y después una velada muy larga. El que ahora es el rey de España tocó el cajón y estuvo toda la noche acompañando allí a los que cantaban”, cuenta.
En todo caso, asegura que sus contactos con los poderosos fueron muy escasos - “a Pedro Sánchez le he visto dos veces en mi vida en entregas de medallas, igual que a Zapatero o a González” -, aunque sÍ recuerda a “gente muy cercana y estupenda”, como el fallecido líder socialista español Alfredo Pérez Rubalcaba. “Otra cosa es que uno se sienta cerca de lo que sabe que es mejor en general para el país, sobre todo después de mirar lo que hay enfrente”, dice.
El disco que se publica el día 10 es un concierto que grabó en Gijón (norte de España) en 2022, acompañado por la Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias y el Coro de la Fundación Princesa de Asturias, con hasta 130 personas sobre el escenario.
Un formato que repetirá en una gira de por el momento ocho conciertos en España, que convence al público “por aplastamiento”, bromea.
“El resultado es espectacular, yo disfruto mucho”, confiesa, y asegura que ya superó la etapa de “rebelarse” contra sus propias canciones más exitosas y antiguas, por lo que sonarán temas como “El abuelo Vítor” o “Solo pienso en ti”.
Un espectáculo con una entidad muy diferente a la que algunos artistas proponen ahora. “Los formatos musicales han cambiado muchísimo. En mi época, a alguien con muchísimo éxito no se le ocurría presentarse en un escenario con un ‘disc jockey’ y unas luces porque directamente le tiraban cosas, pero ahora a la gente le importa más el nombre de esa persona que lo que lleve detrás”, reflexiona.
Copyright © 2024 La Crónica de Hoy .