Metrópoli

En México los microsismos se han registrado hace miles de años

Imposible saber en qué momento van a ocurrir, porque su onda de diseminación es muy rápida. Los edificios que ya resintieron algún microsismo deben contar con un visto bueno de seguridad y una constancia estructural

Una grieta de aproximadamente 1 kilómetro de largo fue detectada en el poniente de la Ciudad de México y podría ser la causa de microsismos en esa zona.

La CDMX está sobre una estructura geológica, pero colonias como Narvarte y Roma o el Centro Histórico hay una capa muy delgada, con apenas 15 o 20 metros, ya que este tipo de suelo es muy blando

Aunque existe una gran preocupación por los recientes movimientos telúricos en la Ciudad de México, hay que recordar que en México los microsismos se han registrado hace miles de años y es una actividad completamente normal por nuestra ubicación geográfica, señaló Delfino Hernández Láscares, investigador del Departamento de Biología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), de la Unidad Iztapalapa.

Recordó que la capital del país está sobre lo que se conoce como la Cuenca de México, lo que representa la unión de cuatro valles en la parte central del territorio con un eje Neovolcánico, cordillera muy rocosa que sirve de unión entre la Sierra Madre Occidental y la Sierra Madre Oriental.

El experto en geología, paleontología y protección civil mencionó que "debajo de las 16 alcaldías que existen en la Ciudad de México se encuentra esta estructura geológica, pero hay lugares como las colonias Narvarte y Roma, así como otras del Centro Histórico en las que hay una capa muy delgada, con apenas 15 o 20 metros, ya que este tipo de suelo es muy blando".

Hernández Láscares argumentó que el suelo inmediato de la metrópoli está constituido por tres tipos: blando, por lo regular compuesto de arcilla o barro muy suave; de transición, compuesto por arcilla, roca y arena; y suelo lomas, integrado por roca que está aflorando y depósitos superficiales cubiertos por un manto de vegetación.

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REDACCIÓN
Una grieta de aproximadamente 1 kilómetro de largo fue detectada en el poniente de la Ciudad de México y podría ser la causa de microsismos en esa zona.

Señaló que el estudio y avance en la localización de los movimientos telúricos, permitió conocer con precisión las coordenadas geográficas donde ocurren los movimientos telúricos, lo que también fue fundamental para la localización de la falla Plateros-Mixcoac.

Dijo que, con base en un estudio preliminar de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, del 3 de diciembre de 2023 al 10 de enero, se presentaron 23 movimientos telúricos, de 1.1 al 3.2, concentrados en las alcaldías Magdalena Contreras y Álvaro Obregón.

Por la imposibilidad de saber cuándo ocurrirán, ya que su onda de diseminación es rápida, recomendó tener un plan de acción, e incluso mantenimiento preventivo en complejos habitacionales e identificar aspectos relevantes en el entorno.

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Sostuvo que muchos edificios con casi un siglo de vida no tienen medidas correctivas ni visto bueno de seguridad y operación, ni constancia estructural, es decir, no tienen condiciones para soportar estos sismos, ya que la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, todas las unidades habitacionales, del tipo que sean, “están obligadas a tener programa interno de protección, pero sólo dos por ciento cuenta con él y no están cumpliendo con la ley”.

Los edificios que ya resintieron algún microsismo deben contar con un visto bueno de seguridad y operación y una constancia estructural, e identificar en qué condiciones está la vivienda, sobre qué tipo de suelo está, si hay cables eléctricos y transformadores en mal estado, revisar periódicamente las instalaciones de gas y los tanques estacionarios, y mantener las azoteas libres y sin depósitos pesados.

Asimismo, recomendó no intervenir paredes en casas y departamentos sin estudios previos y no alterar estructuras para poner ventanas o ampliar los espacios, porque no se sabe qué se está haciendo o si se va a dañar a nivel estructural.