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Se puede avanzar si no hay corrupción, la variable principal del éxito en el manejo de la economía ha sido no permitir la corrupción, eso es la clave, porque eso era lo que impedía que México progresara, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Por eso están equivocados, lo digo de manera respetuosa, quienes están pensando que vamos a dar marcha atrás al propósito de reforma al Poder Judicial, que está podrido, que está dominado por la corrupción, solo porque hay nerviosismo financiero. No!”, afirmó.
“Sabemos que si limpiamos el Poder Judicial, en el supuesto de que tengamos desajustes en la paridad, a mediano y a largo plazo eso nos va ayudar a todos pero además está de por medio la justicia”, explicó el Jefe del Ejecutivo.
Durante su conferencia matutina, preguntó “¿Cómo vamos a cambiar corrupción por justicia, qué les pasa? Si el éxito de nuestra política económica ha sido precisamente no permitir la corrupción”.
Explicó que México logró reestablecer el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, “por la honestidad, y por eso somos el principal socio comercial con Estados Unidos, y por eso hay récord en Inversión Extranjera Directa, y por eso México es de los países con menos desempleo en el mundo”.
Resaltó que eso no había sucedido, “ya casi tenemos empleo pleno; pero tiene que ver mucho con eso; la fórmula es no permitir la corrupción, no hacer un gobierno ostentoso”.
El Primer Mandatario dijo que gobernar con austeridad es honestidad y austeridad, y con eso “se dispone de muchísimo dinero para atender las necesidades del pueblo y reactivar la economía, esa es la fórmula, por eso lo del Poder Judicial”.
Dos jueces de muestra
Luego cuestionó “¿Cómo quedarse con los brazos cruzados, si estamos viendo ayer; no lo preparamos, sino espontáneo, a ver como cada quince días en la sección de Cero Impunidad, qué se dio a conocer?”
Explicó que hubo dos cosas; “una, un juez concedió un amparo a Rafael Caro Quintero para no ser extraditado; casi al mismo tiempo, una jueza le da la libertad a Duarte, ex gobernador de Chihuahua”.
El presidente se preguntó y respondió, “¿De dónde son esos jueces? Del Poder Judicial. Pero si vemos el comportamiento de esos jueces vamos a encontrar muchas otras cosas, como es el caso de este ministro presidente de la Corte, está enojado con nosotros pues cómo no va estar enojado?”
Dijo que es entedible que “ellos no estén de acuerdo, pero nos va ayudar mucho la reforma al Poder Judicial, que los jueces, magistrados, los ministros, los elija el pueblo, eso es todo”.
Justicia, solo para quien la puede comprar
Luego, el Jefe del Ejecutivo afirmó que “no hay justicia para el que no tiene con que comprar su inocencia”.
Añadió que es muy claro que los potentados de México, que son los que están molestos, “además por vanidad, por el privilegio de mandar, porque cada potentado, cada corporativo de los más importantes, tienen empleados a jueces, magistrados y minstros, de empleados; aseguró que “no habla al tanteo”.
“Yo quiero, como todos los mexicanos, que los jueces, magistrados, ministros sean empelados del pueblo, el soberano es el pueblo, es el que manda, nosotros somos servidores públicos, eso es todo”, explicó.
Dijo que los está observando, “los estoy fildeando como se dice en el beisbol, de cómo están presionando para ver si se da marcha atrás y que siga la corrupción. ¡Pues no, no! Porque no vamos a ser cómplices”.
Separar poder económico del político
El presidente aseguró que no hará tanta campaña con los legisladores, ni con los que están ni con los nuevos; “ellos tienen que asumir su responsabilidad y tienen que demostrar que son representantes del pueblo, auténticos representantes populares”.
“¿Qué voy andarles diciendo oye, ayuda para que tengamos mayoría y se pueda reformar la Constitución y entonces se puedan elegir los jueces, a los magistrados? No, ellos tienen que entregarle cuentas al pueblo porque eso es la democracia”, comentó.
El Primer Mandatario dijo que la clave está en separar poder económico, del poder político, que el gobierno atienda a todos, respete a todos, que haya un auténtico estado de derecho, “no un estado de chueco, no un estado de cohecho, no simulación de que la Constitución se respeta en la forma para violarse en el fondo”.
Entonces, eso es lo más importante es que se establezca el que no haya corrupción, que se destierre la corrupción, que se destierre la impunidad, y esto es bueno para todos, hasta para estos que quieren, por fantoches, seguir teniendo ahí de empleados a miembros del Poder Judicial.
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