Escenario

‘La Máquina’: Entretener a punta de madrazos

CORTE Y QUEDA SERIES. Analizamos la nueva miniserie de Disney que es protagonizada por Gael García Bernal y Diego Luna, bajo la dirección de Gabriel Ripstein

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Fotograma de 'La Maquina'.

Fotograma de 'La Maquina'.

CORTESIA

La Máquina, con Gael García Bernal y Diego Luna, que es dirigida por Gabriel Ripstein en sus seis episodios y que tiene a Eiza González en el reparto, resulta ser una propuesta, digamos, muy amena del ya muy tocado tema de la corrupción en el mundo del boxeo donde además meten otro muy sobado tema que tiene que ver con la salud y las consecuencias de recibir tantos golpes durante la vida “útil” de un pugilista.

PRIMER ROUND

Quiero creer que lo que motivó el presentar esta historia fue simplemente entretenimiento con una leve dosis de drama y suspenso para no volverla comedia porque, justamente, el querer juntar dos grandes temas en una sola historia da como resultado lo que al final sucedió en La Máquina: Una serie que pudo ser extraordinaria y que se queda en algo que olvidas en un par de días aun siendo muy entretenida en el momento de estarla viendo.

Visualmente la serie es impecable; las secuencias de boxeo están filmadas correctamente sin escatimar movimientos adecuados al ritmo ágil de las peleas mostradas donde (y aquí si me pongo de pie) no hay uso del slow motion en el intercambio de puñetazos ni tampoco sangre salpicando el lente de la cámara. En ese sentido, la emoción de la pelea es honesta y manufacturada con ritmo y edición precisa... Ahí no está la debilidad de la serie porque hay oficio en la realización.

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La trama que presenta a una mafia omnipresente con brazos, ojos y oídos en todas partes y que puede meterse en lo más íntimo de tu círculo de amistades y familia, resulta un MacGuffin que funciona muchas menos veces de las que buscaban el guionista y director; llegando a caer en los absurdos del villano slapstick o de caricatura donde amarran a la doncella a las vías del tren.

Pareciera que se utiliza este recurso cuando aparecen los huecos argumentales y los cubren con un halo de “misterio” para regresar a nuestros protagonistas al drama. Por algo así es que de pronto vemos a la reportera y ex mujer de Esteban, de nombre Irasema interpretada por Eiza González, investigando los fondos del mundo del boxeo como si fuera la versión femenina de Carl Bernstein o Bob Woodward y termina más bien pareciéndose a Mafafa Musguito o Dulce Polly Purasangre.

En cuanto a la enfermedad derivada de los golpes recibidos por años, está manejada de mejor manera y esto se debe, en gran parte, a una muy convincente actuación de Gael García que se siente cómodo en el personaje de Esteban “La Máquina” Osuna viviendo con los primeros síntomas de la enfermedad que aparecen en los momentos más inoportunos de su día a día o en el cuadrilátero y que lo orilla a un pasado que tenía bloqueado y que a mitad de la serie cobra relevancia.

Hasta aquí la trama de La Máquina.

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SEGUNDO ROUND

Lo que viste a la serie es, sin duda, la muy divertida y fluida actuación de Diego Luna como Andrónico “Andy”, el manager de “La Máquina” quien se siente de lo más a gusto en esta persona atrapada en los 90, el new age y el botox para ser siempre joven. Un personaje que pareciera superficial, pero con la profundidad necesaria de ser una persona que vive una profunda depresión e inseguridad debido a su mal manejo de las emociones y de una madurez inoperante, pero eso sí, muy optimista y dicharachero.

La que sale sobrando en esta propuesta es, como casi siempre, Eiza González a la que le quisieron dar una personalidad intuitiva y de investigación resultando menos creíble que la misma Luisa Lane que nunca adivinó que su colega Clark Kent era Superman sin lentes. Así el personaje de González que desde luego pudo ser otra actriz sin problema.

Por el contrario, de resaltar la actuación de Jorge Perugorría como el entrenador de “La Máquina” con una actuación más que convincente y que aun siendo corta en pantalla es lo suficiente para que brille en escena; Karina Gidi como la esposa de Andy que, igualmente aparece poco, pero lo necesario para imprimir a su personaje una imagen muy propia… 

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Roberto Duarte, que conocimos a nivel popular interpretando a Paco Stanley en la mini-serie ¿Quién lo mató? aparece aquí como como el cronista de boxeo Sammy Salgado que le suma dinamismo a las ya de por si dinámicas escenas de pelea y asombrosamente Lucia Méndez como la exquisita mama de Andy que simplemente nació para el papel de la madre sobreprotectora del cuarentón representante de Esteban; de hecho, de lo mejor de la serie es cuando están en la misma escena Diego Luna y ella por el derroche de comicidad y frescura amén del parecido físico entre ambos como resultado del Botox.

Además, que, pese a todo, siempre es un gozo ver la química natural que se da entre Gael García y Diego Luna porque los diálogos que tienen juntos no parecen sacados de un guión o improvisados (que tal vez algunos de los divertidos insultos entre ellos seguro sí) sino de la relación de amistad que llevan de décadas. 

¡KNOCKOUT!

En resumen; La Máquina es una propuesta entretenida, bien filmada, con buenos momentos, secuencias de boxeo bien realizadas, de buen sentido del humor y que es adecuada para un entretenimiento sin pretensiones ni tramas rebuscadas.

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