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La remembranza a una era continua siendo la bandera de muchas bandas que continúan en la escena musical internacional y a Placebo le llegó su oportunidad, se trata de la fecha en que se presentaron en un concierto multitudinario en el majestuoso Teatro Metropólitan de la Ciudad de México, algunos días antes de viajar a la sultana del norte, Monterrey, pues son uno de los headliners del festival Pal’ Norte.
A muy temprana hora en donde sonaba la primera llamada de la venue aún se sentía el vacío de la misma, cosa contraria a las afueras del recinto donde los vendedores ya hacían su agosto con la memorabilia de la banda británica conformada por Brian Molko y Stefan Olsdal principalmente aunque en sus filas han tenido a otros tantos músicos.
Colocados en lugares específicos y a manera de advertencia había carteles informativos sobre la prohibición de cámaras y celulares y una cordial invitación a “no pasar el concierto filmando con los celulares” así como justificar que es complicado para la banda “conectar con el público y comunicar de manera efectiva las emociones de las canciones” y un llamamiento a “estar aquí y ahora en el presente y disfruten el concierto. Porque este momento exacto nunca volverá a suceder. Nuestro propósito es crear comunión y trascendencia. Por favor ayúdenos en nuestra misión”, decía el escrito.
Petición ratificada en los altavoces y al parecer bien recibida por los presentes que ya tomaban su asiento respectivo y que estaban serenos bajo una atmósfera de música electrónica mientras esperaban la ansiada tercera llamada y que aprovechaban para tomarse la selfie porque ya se la saben... si no hay evidencia en las redes no fuiste testigo, cosas de la nueva era.
Rondando las 20:30 hrs y con un “hola México” envuelto en tamborazos salieron al escenario Big Special, el dúo británico de Black Country que han sido los teloneros que han acompañado a Placebo por su gira por Estados Unidos y Latinoamérica integrado por Joe Hicklin y Callum Maloney, literalmente una Gran y Especial sorpresa. Una batería, un sintetizador, una gran voz y mucho rock.
Luego de este vertiginoso inicio ya alrededor de las 21:00 hrs el staff se tomó unos minutos para preparar el escenario, situación que duró de media hora y que desató la ansiedad de algún desesperado que comenzó a silbar cual arriero. Media hora después las ansias se apagaron con la presencia de la banda de rock alternativo formada en 1994, Placebo.
Aunque básicamente el setlist estuvo basado en el más reciente material discográfico Never let me go (2022) con temas como “Forever Chemicals”, “Beautiful James”, “Hugz”, “Twin Demons”, “Surrounded by Spies”, “Sad White Reggae”, “Try Better Next Time”, “Went Missing” y “Fix Yourself”, interpretados a lo largo de la noche.
“Muchas gracias y bienvenidos mi nombre es Brian Molko y somos Placebo, tenemos mucho ruido para ustedes ok, esta cancion se la dedico a mi hermano”, dijo el vocalista antes de interpretar “Happy Birthday in the Sky”, convirtiendo así la velada en un momento memorable e íntimo iluminado con unas velas artificiales combinadas con las lucecillas de los celulares dándole al evento ese aire antaño, como cuando se animaba a las bandas con la tenue luz de encendedores.
“Scene of the Crime”, “Bionic” y “Soulmates” también hicieron su aparición hasta que en este último tema Molko detuvo la presentación para llamar la atención de un espectador que pese a la petición de la banda grababa desde su smartphone al grado de amenazar con retirarse del escenario, tras los abucheos del público, y la aceptación de culpabilidad Placebo reanudar la presentación.
Cabe mencionar y hacer una reflexión al respecto, es verdad que en la era en que vivimos de redes sociales y ponderación de las mismas el que una banda pida no grabar es algo casi imposible de realizar, aunque el espectador que fue cachado por el vocalista fue el que cargó la culpa, muchos otros lo hacían por breves momentos, igualmente reprendidos por el staff.
No está mal que los artistas pidan este favor a la audiencia, en verdad se disfruta el concierto de otra manera, pero haciendo reflexión de ‘ni muy muy, ni tan tan’ no debería ser tan restrictiva la petición, pero también habría que poner de nuestra parte a la hora de ponderar el grabar el concierto.
Por el resultado de la noche de ayer de la presentación de los británicos en el Teatro Metropólitan, resultó absolutamente acertada la petición y totalmente cierta que la conexión de la mayoría de la audiencia, si no es que toda, fue inmediata y que existió una retroalimentación notoria entre la banda y la gente.
El setlist fue completado con “Too Many Friends”, “For What It's Worth”, “Slave to the Wage”, “Song to Say Goodbye”, “The Bitter End” e “Infra-red” en su tiempo regular y de un encore igualmente enérgico con “Taste In Men” y “Running Up That Hill (A Deal With God)”, cover del tema de 1985 de la cantautora británica Kate Bush.
Placebo en el Teatro Metropólitan fue un concierto redondo, con peticiones especiales, pocas distracciones tecnológicas personales, un espectacular juego de luces y unos visuales psicodélicos, una banda de músicos que acompañaron a Molko y Olsdal, un concierto como si fueran los noventas o dosmiles, victoria para la música.
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