Día de la Candelaria: ¿Por qué comemos tamales este día?
La práctica de consumir tamales en el Día de la Candelaria tiene raíces tanto en la tradición católica como en las prácticas culinarias prehispánicas que celebraban el maíz como un alimento sagrado
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Productoras de tamales de ollita en la explanada municipal de Ocoyoacac
El Día de la Candelaria es una celebración religiosa que tiene lugar el 2 de febrero en varios países de América Latina, especialmente en México. Esta festividad marca el final de las celebraciones de la Navidad y se asocia con la presentación de Jesús en el Templo, de acuerdo con la tradición cristiana.
En México, el Día de la Candelaria es conocido por la tradición de la Rosca de Reyes, que es un pan dulce circular adornado con frutas cristalizadas y azúcar. Dentro de la rosca, se coloca una pequeña figura que simboliza al Niño Jesús. Quienes participan en la celebración de la Candelaria cortan la rosca y aquellos que encuentran la figura del Niño Jesús se comprometen a organizar una fiesta o reunión el 2 de febrero, conocida como “La tamaliza”, donde se sirven tamales y otras delicias.
Además, muchas personas llevan las imágenes del Niño Jesús a la iglesia para ser bendecidas durante la Misa de la Candelaria. Esta festividad combina elementos de la religión católica con tradiciones populares y culinarias, creando una celebración rica en significado y color.
Rosca de Reyes: ¿Cuál es su origen y qué significa?
¿Por qué celebramos con tamales?
La costumbre de servir tamales el Día de la Candelaria está relacionada con la tradición católica de la presentación de Jesús en el Templo, que se celebra el 2 de febrero. Según la ley judía, una mujer debía presentar a su hijo primogénito en el templo cuarenta días después del parto. Este acto, conocido como la Purificación de la Virgen, también se celebra en esta fecha.
En México y en otras partes de América Latina, esta celebración se ha mezclado con tradiciones indígenas y prehispánicas. La conexión con los tamales proviene de la promesa asociada con la Rosca de Reyes, que es compartida durante la Epifanía (6 de enero). Aquellos que encuentran la figura del Niño Jesús dentro de la rosca se comprometen a organizar una fiesta el Día de la Candelaria y proveer los tamales como parte de la celebración.
Fieles acuden a la Capilla de la Purificación de Nuestra Señora de la Candelaria, en la alcaldía Venustiano Carranza
Por lo tanto, la costumbre de servir tamales en el Día de la Candelaria es una continuación de la celebración de la Epifanía y una forma de cumplir con la promesa hecha al encontrar la figura en la Rosca de Reyes. Es una manera de unir lo religioso con lo culinario y lo social en una celebración festiva.
Tamales: tradición prehispánica
La conexión de los tamales con el Día de la Candelaria también tiene raíces en tradiciones prehispánicas. Antes de la llegada de los españoles a América, las civilizaciones indígenas, como los aztecas y los mayas, ya tenían prácticas culinarias que involucraban el uso del maíz, ingrediente principal en la preparación de los tamales.
En las culturas prehispánicas, el maíz era considerado un alimento sagrado y fundamental. Los tamales eran una forma de preparar y consumir maíz de manera especial. Además, se realizaban ofrendas y rituales que involucraban la preparación de alimentos, incluyendo tamales, como parte de festividades religiosas y ceremonias importantes en el calendario indígena.
Venta de tamales en puestos callejeros, este día de la Candelaria
Con la llegada del cristianismo y la posterior mezcla de las tradiciones indígenas con las europeas, las festividades indígenas fueron incorporadas a las celebraciones católicas. En el caso del Día de la Candelaria, la costumbre de servir tamales puede haber incorporado elementos de la antigua tradición indígena relacionada con el maíz y la alimentación ceremonial.
En resumen, la práctica de consumir tamales en el Día de la Candelaria tiene raíces tanto en la tradición católica como en las prácticas culinarias prehispánicas que celebraban el maíz como un alimento sagrado.
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